Las revistas son publicaciones con un número variable de páginas que incluyen contenidos generales o temáticos. Suelen combinar información textual e imágenes, ya sean fotografías, infografías o ilustraciones.
En formato impreso, perduran en el tiempo y favorecen la relectura de sus contenidos, por lo que incrementan la vida útil del material de comunicación. En función de la finalidad y el tipo de contenidos incluidos, podemos encontrar comerciales, divulgativas y de actualidad. Son, a día de hoy, elementos que mejoran la imagen de tu marca y consiguen fidelizar a los lectores.
Cómo diseñar una revista
Has de tener en cuenta que concebir y realizar cualquier tipo de publicación impresa es un trabajo arduo, complejo y, por lo general, multidisciplinar. Aunque no es lo mismo desarrollar revistas de novedades que científicas o comerciales, las etapas de creación suelen ser comunes:
- El punto de partida es conceptualizar la revista. Para ello, has de determinar a quién se dirige y qué va a proporcionarle. Debes escoger el tema, el enfoque, el estilo de los contenidos y la periodicidad, así como asignar los recursos, las calidades y el número de páginas.
- Para crear los contenidos, has de contar con redactores capaces de generar información de valor. El número y la formación de los integrantes de este equipo dependerá del tipo de contenidos que se pretendan transmitir.
- Diseño de la publicación. Esta parte se desarrolla de forma paralela a la anterior, ya que ambas están muy conectadas. La maqueta determina la extensión de los textos y el número de artículos. Sin embargo, su importancia puede conllevar cambios o ampliaciones en determinadas secciones o apartados. Recuerda que tu revista debe entrar por los ojos, atraer, interesar y mostrar niveles de lectura que faciliten la comprensión del texto.
- Impresión de la revista. Una vez generado y validado el contenido, toca pasar al papel todo lo creado. El resultado final es fundamental para la imagen y para el engagement de la publicación. Por ello, necesitas apostar por profesionales altamente cualificados y experimentados. Más allá de trasladar al papel el diseño proporcionado, esta parte incluye otras labores propias del manipulado, como, por ejemplo, el plegado y la encuadernación.
Por qué editar una revista o catálogo de empresa
Pocos medios de comunicación son tan eficaces para que compañías y marcas transmitan sus novedades y servicios. Cinco son las grandes ventajas que te aportan:
- Predisposición del target. La audiencia suele mostrarse receptiva a este formato, el cual brinda credibilidad, fiabilidad y fidelidad a la marca.
- Larga duración. Es el soporte de comunicación que más tiempo permanece activo. Algunas incluso se coleccionan para siempre. A menudo, se leen y se releen varias veces.
- Posibilidades creativas. No importa si usas un pequeño formato o una más grande, los encartes y el uso de recursos de diseño gráfico innovadores harán que la revista sea sumamente atractiva.
- Calidad positiva. Tanto si se utiliza la impresión digital como la convencional, se obtienen materiales de comunicación muy impactantes, por lo que no hay que escatimar en este punto.
- Segmentación. Si trabajas bien la definición de la audiencia, la temática, la concepción y la distribución, tu público objetivo será alcanzado de forma influyente. Emplear una publicación, por ejemplo, de 40 páginas para mostrar las novedades y la actualidad del sector despertará el interés de los lectores. Además, les permitirá llevarse el contenido a casa y consultarlo a su ritmo.
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