En diseño gráfico, elegir la tipografía idónea para el proyecto tiene la misma importancia que elegir los colores, las imágenes o el formato de un trabajo gráfico.
La elección de una tipografía u otra debe estar basada en criterios estéticos y funcionales y adecuada al contenido y propósito general de cada proyecto gráfico. Elegir una u otra tipografía cambiará completamente el aspecto y resultado final de tus diseños, por esta razón no deberás elegir una tipografía guiándote únicamente por tus gustos personales. En este post te damos pautas para que puedas escoger correctamente el tipo de letra que mejor se adapte a cada uno de tus diseños gráficos.
¿Qué es una tipografía?
La palabra tipografía proviene de dos términos griegos: “typos” que significa golpe, marca o forma, y “graphia” que significa cualidad de escribir.
Podemos definir la tipografía como “el arte de diseñar las letras”. Se denomina así a la disciplina que estudia la representación gráfica de las letras para que el lenguaje escrito sea efectivo.
Al mismo tiempo, denominamos también tipografía a la escritura con un conjunto de caracteres alfanuméricos, elaborados previamente y que cuentan con un estilo y una serie de características en común.
Tipos de Tipografías
Sin profundizar demasiado dentro de cada categoría de tipografías, podemos clasificar a las fuentes tipográficas por su morfología en 4 grandes grupos:
- Con serifa (romanas)
- Sin serifa (palo seco)
- Cursivas (manuscritas)
- Decorativas (exposición)
En el siguiente artículo sobre tipografías en las artes gráficas profundizamos sobre los distintos tipos y características.
Aspectos que considerar a la hora de escoger una tipografía para tu proyecto
La tipografía ayuda a comunicar las imágenes que deseamos reforzando el diseño de un folleto o un cartel, ayudando a mejorar la legibilidad. Por este motivo se debe tener en cuenta:
- La audiencia: el tipo de letra y el diseño debe ser acorde al público que se quiera llegar, no es lo mismo escoger una tipografía para niños que para adultos.
- El tipo de texto: este debe de estar en consonancia con el mensaje a comunicar, puede variar según si este es informativo, promocional, educativo, …
- La extensión del texto: en textos muy largos es recomendable emplear tipografías que no cansen al lector.
¿Qué tener en cuenta al elegir un tipo de letra?
Al decidir qué fuentes usar, menos, es más. Para ayudar a una mejor lectura del proyecto es recomendable limitar el uso de una o dos fuentes. A continuación, os especificamos algunos aspectos para escoger la tipografía más adecuada para vuestro proyecto.
- Relacionar tamaño de letra, ancho de columna e interlineado. Un tamaño entre 8 y 11 puntos y una longitud de línea entre 60 y 65 caracteres es ideal para una buena legibilidad de los textos. Se debe tener en cuenta que si varía una de las tres cosas se tendrá que adaptar las otras dos para que la proporción sea siempre la adecuada y no cansar al lector.
- Contrastar el color entre las letras y el fondo. La mejor combinación en cuanto a legibilidad es el texto negro sobre fondo blanco. Si se utilizan otros fondos, el texto negro puede leerse con un tamaño grande desde lejos. En cambio, si el texto es de otro color, mejor realizar textos cortos con tipografías muy legibles y en un tamaño mayor y más grueso.
- No combinar más de dos tipos de letra. Tipografías muy diferentes y bien combinadas pueden generar contraste, diseños atractivos y dinámicos. Usar muchos tipos de letra en un mismo trabajo puede generar confusión y desorden.
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El equipo del centro de atención al cliente son profesionales en impresión, por lo que os podrán aconsejar sobre cuál es la mejor tipografía para cada proyecto para que esta sea legible para vuestro público objetivo y transmita el mensaje que queremos.
